Miami.- Con propuestas inspiradas en el trópico para un consumidor de lujo, llega Colombia al Miami Fashion Week 2018.
Colombia está posicionado como la fábrica de diseñadores de América Latina, es un país donde la sofisticación y el lujo se evidencian en la innovación de sus empresas del Sistema Moda.
Un total de cinco diseñadores con alta proyección internacional como Daniella Batlle, Lina Cantillo, Carolina Estefan, Goretty Medina y Divina Castidad estarán en la plataforma de moda más representativa entre la cultura americana y la latinoamericana.
ProColombia, entidad del gobierno que promueve las exportaciones no minero-energéticas, el turismo y la inversión, liderará la participación en el evento con el lema ‘Colombia es el secreto mejor guardado de las Américas’.
«El diseño colombiano ha sabido mezclar la creatividad inspirada en la biodiversidad del país, con el respeto por los recursos naturales y el apoyo a comunidades vulnerables, por eso consideramos nuestra industria de la moda como una joya digna de mostrar», aseguró Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia.
El Miami Fashion Week es un escenario muy importante para el posicionamiento de Colombia como proveedor de moda para Estados Unidos y América Latina.
Estados Unidos es ya el destino más importante para las exportaciones colombianas de la industria. En 2017, Colombia exportó US$286,4millones en este sector al mercado americano aprovechando los beneficios arancelarios del TLC entre ambos países.
Características de la industria colombiana:
Colombia cuenta con experiencia de más de 100 años en el desarrollo de moda, es líder en la categoría de vestidos de baño en América Latina, es el tercer exportador mundial en ropa de control y es el quinto país exportador de textiles e insumos para Sur América. La producción de telas con tecnologías inteligentes con valor agregado como protección UV, hidratantes para la piel o antihumedad, son ejemplos del portafolio colombiano. Además, las empresas colombianas se adaptan a las necesidades de los clientes con producción mínima flexible, industria integrada en sus procesos y tiempos de entrega competitivos.