Los Ángeles.- Un Demián Bichir que ya está en los cuernos de la Luna y en la Meca del Cine se puede dar el lujo de manifestarse tal cual es, como lo dejó ver durante el agradecimiento que dio tras recibir el premio El Arbol de la Vida que le otorgó el Festival Internacional de Cine en Los Angeles que organiza la Universidad de Guadalajara.
El mexicano expresó el típico “está cab..” más de una vez. La primera porque contó que apenas el mismo día del homenaje, el viernes 5 de septiembre, se dio cuenta que ya está en la edad merecedora para recibir tributos, y la segunda, para manifestar que las cintas no son el detonante para generar una reforma migratoria en este país.
Más que un discurso serio, Bichir platicó entre amigos, los nuevos y los viejos conocidos que se encontró al llegar al Egypthian Theatre donde se llevó a cabo el evento previo a la proyección de la cinta “Las Horas Contigo”.
“Hoy en la mañana me preguntaba: ‘¿cómo que un homenaje?’ Y me dije: ‘Es que ya estás viejo cabrón!’’’, expresó el actor de 53 años. “Ya han pasado varios abriles, y eso que no cuento desde que tenía tres años porque a esa edad mis padres me regenteaban”.
Bichir le agradeció a los directores y actores con quienes ha trabajado, y en especial a sus papás.
“Al mismo tiempo honro a todas las personas que hacen posible todo esto. A mis padres, por supuesto, quienes se conocieron en Torreón haciendo teatro, y decidieron mudarse a la Ciudad de México sin dinero y sin conocer absolutamente a nadie”.
En la ceremonia se dieron cita las estrellas mexicanas que protagonizan Las Horas Contigo como Isela Vega y Cassandra Ciangherotti, así como Arcelia Ramírez, Nailea Norvind, el cineasta Alfonso Arau, Bruno Bichir y los organizadores de la muestra fílmica que concluye hoy domingo con la cinta El Último Trago.
Las cintas no resuelven el problema migratorio
El ya conocido conocedor de los problemas migratorios en este país, Bichir opinó que las películas no resuelven la reforma migratoria en Estados Unidos.
Agregó que las cintas mas bien sirven para abrir los ojos y conmover corazones del público.
“Con nuestras películas ni ayudamos a resolver el problema en casa, ni vamos a lograr que este gobierno acelere la reforma migratoria. No vamos a lograr que todos los niños que están en albergues en la frontera tengan acceso a por lo menos a abogados justos.
“No vamos a lograr nada de eso, seguramente vamos a lograr abrir los ojos de las personas, pero está carbón!, está difícil, entonces si de pronto podemos conmover corazones y un poco de esas … entonces que viva el cine”, dijo en tono chacharachero.