Las vacunas y los refuerzos son herramientas esenciales para los cuidadores de familias afroamericanas, ya que California lucha contra el creciente número de infecciones por la Covid-19 debido a la propagación de la variante Omicron.
En una conversación comunitaria con Ethnic Media organizada por la Iglesia Saint Paul AME de San Bernardino, Black Voice News y California Black Media, los líderes comunitarios y los cuidadores de familias afroamericanas discutieron la importancia de las vacunas para ayudar a mantenerse seguros y capaces de cuidar a sus familias. especialmente en un momento en que Omicron está acrecentando su fatiga y aislamiento.
La reunión que atrajo a más de 60 reporteros y miembros de la comunidad, también se transmitió en vivo en las redes sociales y fue copatrocinada por el Departamento de la Tercera Edad de California. Cheryl Brown, integrante de la Comisión sobre el Envejecimiento del estado, moderó la discusión.
Los panelistas pidieron que los cuidadores de familias reciban prioridad para vacunas, refuerzos, citas para pruebas y kits de pruebas en el hogar, y equipo de protección personal.
“Los cuidadores no han sido considerados trabajadores esenciales y, por lo tanto, no eran elegibles para ser los primeros en la fila cuando se inició con la campaña de vacunación contra la Covid a principios de 2021”, dijo la Dra. Donna Benton, profesora asociada de investigación de Gerontología de la Facultad de Ciencias Leonard Davis de la Universidad del Sur de California.
Benton también se desempeña como Directora del Centro de apoyo para cuidadores familiares de la USC y del Centro de recursos para cuidadores de Los Ángeles. “Las vacunas son un arma clave contra los estragos de este virus”, acotó.
“La encuesta de cuidadores locales de la USC encontró que del 60 % que tenía trabajos fuera del hogar, el 30% había abandonado la fuerza laboral formal para cuidar a sus familias, un factor que aumentó su aislamiento. Los abandonos fueron principalmente de mujeres”, anotó Benton.
Hay más de 4,5 millones de cuidadores familiares solo en California, pero Benton dijo que en gran medida son invisibles en el sistema de atención médica general.
“Los cuidadores dicen ‘queremos los cubrebocas’. Necesitamos PPE. Necesitamos ser la prioridad para los refuerzos y también para las pruebas’”, dijo. También señaló la casi imposibilidad de obtener un kit de prueba en el hogar o una cita para una prueba de la Covid.
La Administración del presidente Joe Biden anunció el 13 de enero que compraría 500.000 millones adicionales de kits de prueba para el hogar. Benton expresó su esperanza de que los cuidadores familiares fueran una prioridad para la distribución de esos suministros adicionales. La administración planea distribuir en los hogares mil millones de kits de prueba.
Benton también habló de la necesidad de expandir las vacunas y los servicios de refuerzo en el hogar, y afirmó que es difícil llevar a un sitio de vacunación a las personas confinadas en el hogar, especialmente a aquellas con demencia. “No hay suficientes trabajadores de la salud yendo de puerta en puerta”, comentó.
Ruth Rembert compartió su historia personal de ser la única cuidadora de su esposo, que tiene mieloma múltiple, el cáncer que mató al exsecretario de Estado Colin Powell el año pasado. Debido a su sistema inmunológico enormemente comprometido, incluso un resfriado puede tener graves consecuencias para la salud, y agregó que no permite que nadie entre a la casa por temor a infecciones menores.
“No permitiré que entre a mi casa nadie que no haya sido vacunado, y, aun así, insisto en que usen cubrebocas. La gente no se da cuenta del peligro en el que te ponen cuando no se vacunan o cuando no usan cubrebocas,” dijo Rembert, y explicó que se difundió mucha información errónea sobre la necesidad continua de usar un cubrebocas en lugares cerrados y en lugares congregados, incluso si la persona se ha vacunado.
“He escuchado a la gente decir, no quiero poner eso en mi cuerpo. Yo digo: ‘tienes dos opciones. Puedes optar por tener esta vacuna en la vena, o puede elegir tener formaldehído en las venas, porque así de grave es”.
La reverenda Noella Buchanan, coordinadora de cuidadores de la Alianza Ministerial de la Iglesia Metodista Episcopal Africana de la Conferencia del Sur de California y pastora jubilada, ha sido la cuidadora de su suegra, su cuñada, su madre y luego su esposo. Ahora es la cuidadora principal de su prima, que tiene más de cien años.
Buchanan señaló que, a lo largo de la historia, las personas afroamericanas han sido utilizadas para pruebas médicas falsas, incluido el Experimento Tuskegee, y por lo tanto tienen miedo a vacunarse. “Muchas personas creen que su fe los ayudará a salir adelante. Pero estamos viendo morir a tantos seres queridos cuando no se han vacunado”, expresó.
Al igual que Benton, Buchanan abogó por que los trabajadores de la salud administraran las vacunas en el hogar. “Las personas mayores no pueden formarse durante dos o tres horas”.
Señaló que las vacunas y los kits de pruebas en el hogar se pueden entregar a través de las casas pastorales comunitarias. “La gente confía en sus iglesias”.
La rapera de 22 años Kennedy King compartió un rap que ganó primer lugar en un concurso organizado por la Iglesia AME de Saint Paul en San Bernardino, California. King y su familia han sufrido por la Covid y teme que sus abuelos se contagien y dijo que las consecuencias serían mucho mayores.
King enumeró que su generación obtiene la mayor parte de la información por medio de las redes sociales, y la música interpretada por raperos son una herramienta importante para difundir la efectividad de las vacunas.
“La música es súper importante y relevante para la vida de los jóvenes; nos comunicamos mucho a través de la música”, dijo antes de interpretar su galardonado rap.
“Les tenemos que meter en la cabeza de los jóvenes que, si no se preocupan por sí mismos lo suficiente como para vacunarse, mínimo se preocupen por los adultos mayores que los rodean”, finalizó King.