
Los Ángeles.- Ante la inminente medida de recortes de miles de empleos al IRS para fines del próximo mayo bajo el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), con lo que se reducirá su fuerza laboral entre un 18 y 25 por ciento, se podría reducir los ingresos federales en 315 mil millones durante la próxima década.
Al mismo tiempo, el Congreso, controlado por los republicanos, presiona para extender los recortes de impuestos de la era Trump de 2017.
Los analistas estiman que la extensión añadiría 4 billones de dólares a la deuda nacional en 10 años, y la mayoría de los beneficios irían a parar a los estadounidenses más ricos.
Un panel de expertos en impuestos convocados por American Community Media, analizaron las implicaciones de estos cambios en los ingresos del gobierno, la economía y los contribuyentes de todo el país.
Natasha Sarin, profesora de derecho y finanzas de la Facultad de Derecho y Facultad de Administración de Yale, dijo que se espera que espera que IRS recaude para la temporada 2024 alrededor del 97 por ciento de los ingresos que financian al gobierno federal (alrededor de 5 billones de dólares este año).
“Pero se perderán unos 700 mil millones de dólares, una parte considerable de los ingresos”, comentó. “Y la razón por la que no se recaudará es porque la gran mayoría de los personas son asalariados y sus impuestos se retienen automáticamente y realmente no hay mucho que hacer ante las oportunidades de evadir o pagar menos de lo debido en sus obligaciones tributarias”.
Explicó que la gran mayoría de los pagos insuficientes provienen de la cima de la distribución, refiriéndose a los más ricos.
“¿Cuánto de este incumplimiento de estos 700 mil millones de dólares proviene de los más ricos? Resulta que se espera que de los 700 mil millones de dólares que faltan en el pago, el 30 por ciento, o 200 mil millones, provienen únicamente del uno por ciento de los estadounidenses con mayores ingresos”, señaló.
Sarin dijo que el alcance del IRS para poder aplicar ese tipo de cumplimiento en la cima de la distribución es lo que más le ha faltado históricamente.
“Y eso tiene cierto sentido. Ese tipo de trabajo es arduo. Requiere mucha mano de obra. Requiere que la gente lea miles de páginas de declaraciones de impuestos corporativos e intente aprender algo sobre la ley de sociedades y cómo aplicarla.
“Y todo eso requiere, tanto experiencia, como una gran cantidad de tiempo y recursos de la agencia para tener un buen desempeño”, señaló.
Agregó que como resultado de la aprobación de la Ley de Reducción de la Inflación durante la administración de Joe Biden, se realizó una gran inversión para otorgarle al IRS la capacidad de realizar más este tipo de trabajo.
“Con los esfuerzos de la actual administración por reducir el tamaño de la agencia y las inversiones en ella, lo primero que ha sucedido, y ya ha sucedido, es que el IRS ha eliminado siete mil empleados temporales”, dijo.
Sarin añadió que esos empleados en período de prueba son personas que fueron contratadas recientemente por el IRS o que recientemente fueron ascendidas a diferentes puestos dentro de la agencia para que se unieran a la agencia para realizar este tipo de trabajo difícil de alto nivel.
“Básicamente, las primeras personas que salieron de la agencia fueron las primeras en ser contratadas y que trabajaban de forma desproporcionada en las áreas de mayor necesidad en cuanto al cumplimiento tributario. Esto es solo la punta del iceberg con respecto a lo que la administración ha dicho qué harán con el IRS, y prevén una reducción mucho mayor.
Dijo que, estimando que el IRS del futuro es un 50 por ciento menor que el actual, sería como si el IRS alcanzara niveles no vistos desde 1960, cuando la población era unos 60 millones menor y la economía era mucho menos compleja.
“Sería una especie de cataclismo”, expresó.
Dijoquedesucederesaestimación, se perderán unos 400 mil millones de dólares solo por la reducción de personal.
“Pero también podría alcanzar los 2,4 billones de dólares en pérdidas durante esta década”, expresó.
Menos recaudación por intercambio de datos
La orden de eliminar la privacidad del contribuyente y el uso de sus datos que IRS firmó, crea desconfianza de las comunidades que aportan sus impuestos con el ITIN.
“Lo que sospechamos que ocurrirá es que las personas serán más reacias a interactuar con la administración tributaria, y esto tendrá dos dimensiones. Por un lado, podrían presentar menos impuestos sobre la renta. Y por otro lado, podrían intentar con sus empleadores o encontrar empleadores que les permitan tener acuerdos laborales sin retención de impuestos.
“Por lo tanto, es increíblemente difícil estimar cuánto se ajustará el comportamiento de los contribuyentes como resultado de este tipo de cambios”, comentó.
Sin embargo, dijo, se podría perder alrededor de 26 mil millones de dólares en ingresos fiscales este año.
“Es decir, en el transcurso de una década. Esa cifra supera ligeramente los 300 mil millones de dólares en pérdidas. Espero que la administración cambie de rumbo, pero también me preocupa que parte del daño aquí se deba a los abusos de confianza que, creo, seguirán presentes durante mucho tiempo.
Los ricos más ricos
Michael Kaercher, subdirector del Centro de Derecho Tributario de la Universidad de Nueva York, dijo que la reestructuración fiscal del IRS beneficiaría a los más ricos del país y sería un duro golpe para Para las familias inmigrantes, muchas de las cuales trabajan en los sectores más afectados por la inflación y el estancamiento salarial.
“Menor ayuda del estado y menores protecciones en momentos de necesidad. ¿El resultado? Mayor precariedad económica, menores tasas de propiedad de vivienda y crecientes disparidades en los resultados de salud y educación”, señaló. “Un doble golpe para los que menos tienen”
Dijo que a medida que se acerca la fecha de vencimiento de los recortes de impuestos de 2017, el Congreso prepara una nueva ronda de desgravaciones fiscales para las empresas y las personas con altos ingresos, que podría ascender a 5 billones de dólares.
“La mitad de los beneficios propuestos, iría al 5 por ciento más rico”, señaló Kaercher. “Lo que hace que esto sea particularmente irritante es la maniobra presupuestaria que se está utilizando. Los legisladores basan sus cálculos en la suposición de que los recortes de impuestos temporales ya son permanentes, eliminando así 3 billones de dólares en costos, en teoría”.
Agregó que los costos reales persisten y, sin compensaciones significativas, podrían resultar en recortes devastadores en programas como Medicaid y SNAP, recursos esenciales para millones de familias de bajos ingresos.
“Si los hogares de bajos ingresos obtienen pequeñas exenciones fiscales con el plan propuesto, es probable que esos ahorros se vean reducidos, y peor aún, y aún, por la pérdida de cobertura médica, asistencia alimentaria y otros servicios de protección social”, dijo Kaercher.
Golpe a inmigrantes
Aravind Boddypalli, investigador asociado sénior del Centro de Política Tributaria, opinó que el acuerdo de intercambio de datos entre el IRS y el ICE socava la recaudación fiscal y la buena gobernanza.
“La función del IRS es recaudar impuestos federales y garantizar que todos cumplan con la legislación fiscal. Este acuerdo reducirá la cantidad de impuestos federales que recauda la agencia, ya que los inmigrantes que actualmente declaran impuestos podrían verse intimidados o, peor aún, deportados”, dijo.
El investigador agregó que se estima que los inmigrantes indocumentados pagan más de 60 mil millones de dólares al año en impuestos federales sobre la renta y la nómina.
“El panorama fiscal del país empeoraría debido a las medidas migratorias del gobierno para intimidar, perseguir o deportar a quienes cumplen con la legislación tributaria”, dijo. “Además, la mayoría de los inmigrantes ya pagan más de lo que les corresponde en impuestos”.
Destacó que los inmigrantes indocumentados no tienen derecho a muchas prestaciones gubernamentales, incluida la Seguridad Social.
“Sin embargo, pagan impuestos federales sobre la nómina que ayudan a que el resto de nosotros disfrutemos de la Seguridad Social. En resumen, se está socavando la buena gobernanza.
“Además, el acuerdo distrae la función principal del IRS, que es procesar las declaraciones de impuestos, atender a los contribuyentes a tiempo y realizar auditorías a los evasores fiscales”, expresó.
Boddypalli también agregó que la medida rompe los cortafuegos de privacidad de datos y reduce la confianza pública.
“Históricamente, el IRS ha mantenido la información de los contribuyentes en alta confidencialidad. La Sección 6103 del código tributario es bastante clara: las declaraciones de impuestos y la información relacionada deben permanecer confidenciales.
“No hay ninguna excepción establecida para la aplicación de la ley migratoria. Por lo tanto, millones de inmigrantes, propietarios de pequeñas empresas, trabajadores esenciales y padres de hijos ciudadanos estadounidenses han confiado en esto y han cumplido con las normas tributarias”, comentó.
Agregó que algunos contribuyentes han esperado que, tras pagar sus impuestos a tiempo, esto les ayude algún día a legalizar su situación migratoria, junto con sus familias, por su buena fe.
Dijo que algunas de estas protecciones vigentes se promulgaron en 1976 después de que la administración de Richard Nixon buscará los registros del IRS para atacar a sus oponentes.
“Así que este es un cortafuegos que ha protegido a todos en Estados Unidos de que su información fiscal se utilice en su contra. De hecho, no necesitamos remontarnos mucho más allá de 2024’, comentó. “Hubo un amplio consenso entre demócratas, republicanos e independientes cuando un contratista que trabajaba en el IRS fue declarado culpable de divulgar sin autorización información fiscal de muchos millonarios y multimillonarios a los medios de comunicación”.
Dijo que actualmente es sorprendente que muchos legisladores actuales no repitan estas preocupaciones, incluyendo a quienes han advertido repetidamente contra la extralimitación y el uso de armas por parte del gobierno.
“El DHS utiliza información de los contribuyentes para fines no tributarios a pesar de sus continuos desafíos legales, incluyendo algunos que han llamado errores administrativos”< señaló.
Por último, Boddypalli advirtió que es probable que empeore el bienestar de muchos niños y familias en todo Estados Unidos.
Comentó que habrá efectos disuasorios para todos, no solo para inmigrantes indocumentados, sino también para ciudadanos naturalizados, residentes permanentes, personas con visas de trabajo, refugiados y asilados.
“Los efectos disuasorios se refieren, en general, a cuando las personas se retraen de participar en la vida pública. Así que las familias inmigrantes evitan la atención médica, los servicios sociales, las escuelas u otros espacios donde perciben riesgo, incluso cuando no han hecho nada malo”, expresó.
Dijo que de acuerdo a una encuesta nacional del Urban Institute en diciembre del 2024, el 29 por ciento de los adultos en todas las familias inmigrantes y hasta el 60 por ciento en familias de estatus mixto, están preocupados por las actividades esenciales porque no querían llamar la atención.
“Eso fue antes de que Trump asumiera al cargo, seguramente ahora esas cifras son más altas”, dijo . “Por lo tanto, es probable que esto afecte la cantidad de personas que declaran impuestos y también la cantidad de personas a las que se les retienen impuestos de sus nóminas según sus trabajos”.
El investigador dijo que esto también significa que muchos inmigrantes podrían no reclamar ciertos beneficios fiscales que merecen y a los que tienen derecho.
“Esto significa que los niños y las familias, incluyendo a los ciudadanos estadounidenses de familias inmigrantes, no podrán acceder al crédito tributario por hijo ni al crédito tributario por ingresos laborales”, comentó Boddypalli.
Richard Prisinzano,director de análisis de políticas de e en el Laboratorio de Presupuesto de Yale, dijo que de acuerdo a un informe, que hizo esa entidad, los indocumentados irregulares pagaron 66 mil millones de dólares en impuestos federales sobre la renta y la nómina en 2023.
“Dos tercios de los cuales fueron impuestos sobre la nómina”, comentó.
En 2023, todos los impuestos sobre la renta de las personas físicas ascendieron a 2,18 billones de dólares, o 6 mil 499 dólares por contribuyente.
El 8 de abril, el IRS y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) firmaron un acuerdo que permite al ICE acceder a información privada de contribuyentes, incluidos domicilios, números de contribuyentes y registros financieros, para ayudar en los esfuerzos de deportación.
Esto llevó a que el IRS perdiera a su tercer jefe este año con la inminente salida, en respuesta al acuerdo de inmigración, de Melanie Krause, quien había estado actuando como comisionada por menos de seis semanas antes de su anuncio.
“Esto probablemente llevará a que muchas personas indocumentadas a quienes se les retienen impuestos a través de un W-2 paguen impuestos de más porque tienen miedo de presentar una solicitud para obtener un reembolso oexiste la posibilidad de que quienes actualmente pagan impuestos de más, prefieran tener un sistema de liquidez en su trabajo. Podrían renegociar sus pagos para evitar retenciones”, dijo.
Explicó que ocultar a los inmigrantes irregulares cuando no tienen un número de seguro social válido no solo afecta el empleo, afecta cualquier acceso al crédito para poder comprar una casa, iniciar un negocio o incluso abrir una cuenta bancaria.
“Así que las repercusiones de una acción como esta, creo, están ocultando aún más a los inmigrantes.Y todos estamos en peor situación colectiva porque la economía formal en la que los inmigrantes pueden participar se reduce un poco más y se obliga a las personas que están enEstados Unidos,incluidas las que están aquí legalmente, a participar en la economía informal”,comentó Prisinzano.