Bogotá, (Notistarz).- La colombiana Shakira fue categórica al afirmar: “Siempre he sido honesta conmigo misma. No puedo vivir en un mundo en el que tenga que esconder mis sentimientos”.
Shakira en una entrevista exclusiva con la revista Hola Colombia hizo referencia a sus sentimientos, la relación con su expareja Gerard Pique, sus hijos, su nuevo entorno en Miami, entre otras vivencias de la diva.
Recordó que en España “me dediqué a la crianza de mis hijos y a apoyar la carrera de mi expareja”, pero ahora en su nueva vida en Miami, aseveró que “nunca había visto a mis hijos tan felices”.
“He podido retomar lo que había dejado por muchos años. Gracias a Dios y al cariño del público, es como si nunca me hubiese ido”, en referencia a su regreso a Estados Unidos.
En Miami sus hijos viven como “dos niños comunes (…) “Van a sus extraescolares sin que nadie los persiga, no como en Barcelona, donde teníamos todos los días paparazzi en la puerta. Llevan una vida libre y normal como dos niños comunes, no como hijos de celebridades”.
“En España», agregó, «los niños no podían ir tranquilos al colegio y la situación que vivíamos con la prensa, en la que los perseguían incluso hasta la puerta de su colegio, no era soportable. Esto no tiene nada que ver con mi público español, que siempre ha sido muy cálido y que me ha dado apoyo en todo momento”.
Contó que “el primer día de colegio ya tenían amigos. Por suerte, son niños muy extrovertidos y tienen grandes amigos que los quieren por lo que son y no por ser hijos de personas famosas. Viven al aire libre y tienen la posibilidad de aprender varios deportes, además de seguir explotando sus talentos en la música, para lo que claramente tienen una predisposición”.
A nivel profesional su estancia en Miami Shakira apuntó: “ha sido un cambio de 180 grados. En España, los años que estuve allí ya establecida, me dediqué a la crianza de mis hijos y a apoyar la carrera de mi expareja. Mi carrera sufrió por estar lejos de la industria de la música y de donde está realmente mi trabajo, que es en Estados Unidos”.
“Cuando los niños están en el colegio, puedo juntarme con compositores y productores distintos en cuestión de horas. He podido retomar lo que había dejado por muchos años. Gracias a Dios y al cariño del público, es como si nunca me hubiese ido”.