
Los Ángeles.- Aunque el enfoque del presidente Donald Trump para tratar con la mayoría de los países es la «diplomacia coercitiva», al parecer con México es la excepción, porque hasta ahora la presidenta Claudia Sheinbaum muestra lo que llama “cabeza fría».
El estilo diplomático de Sheinbaum, una «tercera vía» que no implica ni confrontación ni capitulación, le ha valido retrasos y excepciones en los aranceles impuestos por Estados Unidos, e incluso elogios de Trump, quien a menudo insulta a otros líderes mundiales y a ella la ha calificado de «mujer maravillosa».
Pero, con la misma serenidad que la caracteriza, Sheinbaum elevo un poco más el tono recientemente al afirmar que México no es piñata de Estados Unidos y hasta le podría dar lecciones de ética en medio de las disputas comerciales con el Gobierno de Trump.
»Que se dediquen a hablar de su país, que bastantes problemas tiene. Que no utilicen a México para hacer la campaña, porque México les da muchas clases a los Estados Unidos en muchas cosas. En valores, en ética, en desarrollo, en muchas», dijo la presidenta de México el domingo 27 de abril en Campeche, Campeche, México.
American Community Media convocó a un panel de expertos en relaciones políticas y comerciales entre los dos países que opinaron sobre la postura de Sheinbaum para mantener la línea abierta con Trump, y lo que está en juego para ambos países.

Apaciguar y neutralizar
David R. Ayón, quien forma parte del consejo editorial de Foreign Affairs Latinoamérica y es miembro vitalicio del Consejo de Relaciones Exteriores, opinó que Sheinbaum heredó de las administraciones de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador la estrategia de neutralizar a Trump para mantener una relación sana para ambas partes.
“Normalizar la relación, la imagen y esa sensación de la relación entre México y Estados Unidos. Esto es lo que Claudia Scheinbaum ha heredado. Supongo que ninguno de nosotros sabe cómo trata directamente a Trump en esas llamadas y reuniones.
“Sin embargo, supongo que probablemente le haya transmitido a Trump que ambos, México y Estados Unidos, invierten en mantener la estabilidad de la relación”, comentó. “Y lo que México le ha ofrecido a Trump de gran valor es esta sensación de normalización de que no está loco”.
El autor de libros sobre la política y la formulación de políticas públicas de las latinas y docente en prestigiosas universidades, añadió que desde antes de que Trump asumiera el cargo, Scheinbaum sostuvo públicamente que su homólogo estadounidense no cumpliría con sus amenazas de campaña.
“Decía, ‘Trump no va a hacer esas cosas de las que habla’. En el ámbito político, era solo un discurso de campaña. Así que mantendré esa estrategia de normalizar a Trump hasta el final’”.
Dijo que los diferentes cambios que han experimentado las amenazas arancelarias y sus efectos han tenido efectos claros, tanto sobre el valor del peso como la inversión extranjera.
“Pero la inversión extranjera fluye hacia México. Esos son los intereses básicos de México”, señaló. “Por lo que México, durante tres administraciones consecutivas, ha optado por intentar apaciguar esta amenaza para mantener los flujos de inversión extranjera y el valor del peso”.
Ayón dijo que AMLO y Scheinbaum han tenido mucha suerte en su gestión de Trump.
“Y no solo en su gestión de Trump, sino más allá de eso», añadió. »Es decir, incluso con la COVID-19 porque es sorprendente que, de hecho, la pandemia mundial haya beneficiado a México”.
Opinó que desde la llegada de López Obrador al poder y con la elección de Claudia Scheinbaum como presidenta, México ha mantenido una continuidad básica en cuanto a su modelo económico.
Además, dijo, que en cuanto a los aranceles tiene numerosos informes de que Estados Unidos ni siquiera tiene la capacidad aduanera en su puerto para aplicarlos.
“También hay numerosos informes de que simplemente no está sucediendo. Hay grandes retrasos. Mientras tanto, México está expandiendo su capacidad para participar en el comercio global con el Puerto de Manzanillo”, expresó.
Ayón comentó que considera que esto es prácticamente un monumento a la forma en que esta serie de administraciones mexicanas han abordado tanto su propio modelo económico, el mundo y cualquier cosa que suceda desde Estados Unidos.

Magistral y firme
Luis Alvarado, analista político con sede en Los Ángeles, considera que Sheinbaum y su equipotienen un éxito increíble al anticipar los planes de Trump y por no entrar en pánico por sus declaraciones y acciones, porque han sido muy firmes en el rumbo y nada reaccionarios, a diferencia de Canadá.
“Donald Trump es el presidente de los medios. Es el chico de El Aprendiz”, dijo. “Y creo que esa es una de las cosas que la presidenta Claudia Sheinbaum ha tenido un éxito increíble al comprender cómo Trump ve el mundo, cómo ve y triangula su posición como presidente y cómo negocia con el resto del mundo a través de los medios de comunicación”.
Agregó que gran parte del intercambio de comentarios negativos provenientes de Canadá ni siquiera provenía del primer ministro canadiense, sino de un gobernador.
“Hubo intercambios muy belicosos a los que Donald Trump apostó y los convirtió en enemigos, mientras que Sheinbaum se abrió y se apaciguó con respecto a lo que Trump necesitaba para mantener la narrativa que tiene.
“Así que lo que tenemos son dos jefes de estado que usan los medios como herramienta diplomática para encontrar su lugar y asegurar que cada uno tenga caminos positivos para que ambos puedan negociar con éxito los términos de cada estado”, explicó.
Alvarado también mencionó que tanto Trump como Sheinbaum están implementando reformas importantes en sus respectivos países impulsando agendas para garantizar que su visión de que sus naciones aborden los desafíos de la expansión global tenga éxito.
“Y creo que el gobierno de México y su equipo están tratando de encontrar un lenguaje que coincida con el que la Casa Blanca puede considerar como de colaboración, y es por eso que han podido mitigar toda esta incertidumbre febril.
“Eso ha venido con los cambios de política de esta administración y luego la reversión de esas políticas y su posterior modificación de un día para otro”, dijo.
Comentó que lo que suele ocurrir, es que las entidades diplomáticas y económicas de todo el mundo reciben críticas y no saben cómo manejarlas.
“México lleva varios años haciendo esto, y Sheinbaum, como presidenta, ha sido magistral al asegurarse de que sus políticas coincidan con los cambios para que ambas naciones se mantengan fuertes en esa relación.
“Y reconocen que, bilateralmente, una vez más, ser ambos los principales socios comerciales de cada nación es fundamental para el éxito de sus procesos políticos y para presentar sus cambios internamente en su propio país”, opinó.
Alvarado recordó que ha existido un gran reconocimiento de la importancia de la relación económica entre México y Estados Unidos porque recientemente se convirtió en el socio comercial número uno de Estados Unidos, donde China ya había estado.
“Cuando AMLO dejó el mando de México, hubo controversia, sobre todo muchas preguntas. ¿Por qué le otorgaba al esposo de Ivanka Trump el máximo honor de México, que es el Premio Águila Dorada?
“Pues por el gran reconocimiento de la importancia de la relación económica entre México y Estados Unidos”,dijo. “Así que México está creciendo a pasos agigantados, tanto económica como socialmente.
Concluyó que un ejemplo de eso es que actualmente la migración hacia Estados Unidos en su mayoría proviene de Sudamérica y Centroamérica.

Habilidad
Alberto Díaz-Cayeros, profesor del Instituto Freeman Spogli, ex director del Centro de Estudios Latinoamericanos (CLAS) de Stanford, mencionó que es difícil interpretar lo que pasa por la mente de la presidenta mexicana cuando interactúa con Trump, pero se ha mostrado hábil.
“No sabemos exactamente qué sucede cuando Claudia está cara a cara con Trump, ni qué pasa por su mente, pero algo que sí debemos entender es que, al contrario de lo que muchos medios han dicho, es una persona con personalidad propia”, expresó.
Opinó que Sheinbaum recurre a la serenidad discreta porque siempre repite: “voy a mantener la cabeza fría”.
“Creo que es una política tremendamente hábil y debemos prestarle más atención a ese aspecto de ella: de cómo, de alguna manera, incluso me atrevería a decir que tiene habilidades y elementos que su predecesor, AMLO, no tenía. AMLO no se sentía cómodo actuando en un escenario mundial; Claudia sí”, comentó.
Además, Díaz-Cayeros consideróque másque implementardiplomacia coercitiva,Trumputiliza la política arancelaria conobjetivosen la geopolítica.
“Hayque entender sobre la forma enque Trump utiliza la política arancelaria es que se trata principalmente de, no diría que es una diplomacia coercitiva,creo que esunuso estratégico de los aranceles para objetivos que tienen menos que ver con elcomercio en sí, pero mucho con lageopolítica”, explicó.
Dijo que esa estrategia se puede describir y comprender de acuerdo al libro de hace 80 años del economista político Albert Hirschman, donde explica cómo se utilizaron los aranceles en el período de entreguerras en Europa para construir coaliciones y negociar con los vecinos, especialmente en la Alemania nazi y en Latinoamérica en épocas con un entorno de libre comercio más limitado.
“Los aranceles siempre han tenido un componente estratégico: la forma en que pueden construir esferas de influencia amistosas. Creo que, si no lo pensamos en esos términos, nos perdemos de lo que Trump intentó lograr con muchas de sus políticas arancelarias”, expresó.
Dijo que no se trata necesariamente de los efectos directos sobre el comercio ni de lo que ocurre con los inversores en Wall Street. Se trata mucho de cómo Estados Unidos encontrará su nuevo lugar en el mundo y sus esferas de influencia, y dónde encaja México en esto.
“Y, en cierto modo, México está teniendo suerte en estas esferas de influencia porque podríamos terminar teniendo tratos arancelarios preferenciales que el resto del mundo podría no obtener”, comentó.

Matrimonio por conveniencia
Larry Rubin, presidente y director de la Junta Directiva de la Sociedad Americana de México, opinó que basándose en los 80 años que operan en México, la relación que mantienen México y Estados Unidos es como un “matrimonio por conveniencia”.
“(La relación) De hecho, es muy interesante. Ha cambiado. Básicamente, ven las iniciativas de ambos gobiernos como una oportunidad para que México mejore su seguridad”, explicó.
Dijo que no vislumbra una amenaza previsible para que esta relación cambie si algo sale mal y Trump decide imponer nuevos aranceles.
“No lo veo ni desde el lado estadounidense ni desde el lado mexicano porque es, digamos, un matrimonio de conveniencia. Ambos países se necesitan mutuamente”, comentó.
Dijo que el presidente Trump comprende la importancia estratégica de México que tiene un impacto directo en la seguridad nacional de Estados Unidos, no solo en el comercio, sino también en la seguridad nacional.
“Por ejemplo, no hay ningún hogar en Estados Unidos que no tenga un producto mexicano en la mesa durante la cena, y el presidente Trump lo entiende perfectamente.
“Y también entiende que Estados Unidos necesita a México tanto como México necesita a Estados Unidos. Hoy en día, las cadenas de suministro están muy bien integradas”, expresó.
Rubin dijo que por lo que es improbable e imposible que las plantas estadounidenses en México cierren y se muden a Estados Unidos.
“No sucederá eso, primero, porque no hay suficientes trabajadores para atender estas industrias y, además, no hay suficientes camioneros para sacar el producto de las plantas”, añadió. “Estados Unidos necesita unos 120 mil camioneros que no tiene, por lo tanto, el déficit sigue creciendo”.
Aseguró que es ahí es donde México y Estados Unidos se complementan porque la población mexicana es aproximadamente 20 años más joven que la estadounidense.
“Cuando hablamos de plantas, y más allá de aquellas que requieren una cantidad importante de trabajadores se necesita un trabajador más joven que el que ofrece Estados Unidos hoy en día y la administración Trump lo entiende”, comentó.
Dijo que el embajador de Estados Unidos en México, Ron Johnson, comprende plenamente las implicaciones económicas de la relación bilateral, y no solo la seguridad y otros aspectos de esta importante relación.