Los estudios han demostrado un vínculo entre estas sustancias y graves problemas de salud como disminución de fertilidad, riesgo de alto colesterol, obesidad, alta presión, ciertos cánceres y daño a los riñones y al sistema inmunológico, entre otros
La Junta de Supervisoras del Condado de Los Ángeles aprobó por voto unánime una propuesta para iniciar investigaciones sobre los niveles de sustancias polifluoroalquiladas (PFAS, por sus siglas en inglés, o «sustancias químicas eternas») en el agua potable en el Condado de Los Ángeles.
La iniciativa, presentada por la supervisora Janice Hahn, surge tras la publicación de una evaluación nacional que encontró sustancias químicas eternas en 45 por ciento del agua potable del país, y el cual identificó al Sur de California como una región en la que podrían ser aún más comunes.
“Estas sustancias químicas eternas no se descomponen de manera natural en el medio ambiente, y se pueden acumular en nuestros cuerpos, y generan graves problemas de salud”, dijo Hahn. “Nos urge saber si están presentes en nuestra agua potable, y a qué concentraciones para que podamos empezar a formular un plan para eliminarlas”.
Las PFAS representan una categoría de miles de sustancias químicas sintéticas existentes desde los años 40 y están presentes en muchos productos como espuma de extinción de incendios, telas resistentes a las manchas, y utensilios de cocina antiadherentes, entre otros.
Aunque su uso ha sido en gran parte eliminado gradualmente en Estados Unidos, siguen apareciendo en nuestro medio ambiente. Los estudios han demostrado un vínculo entre estas sustancias y graves problemas de salud como la fertilidad disminuida, riesgo elevado de alto colesterol, obesidad, alta presión, ciertos cánceres y daño a los riñones y al sistema inmunológico, entre otros.
“Uno de los retos que enfrentamos es que nuestra agua potable en el Condado de Los Ángeles la gestionan más de 200 distintos sistemas hídricos – de los cuales algunos seguramente sí realizan pruebas para estas sustancias, y algunos seguramente no. Por eso es tan importante esta resolución, para que podamos empezar a recolectar esta información”, agrego la supervisora.
La propuesta de Hahn impulsa una investigación a sustancias químicas eternas en las aguas potables del Condado.
En primera instancia, solicita un informe de los departamentos de Salud Pública, Obras Públicas y la Oficina Principal de Sostenibilidad dentro de 90 días, con información acerca de cuáles de los 206 sistemas hídricos en el Condado de Los Ángeles actualmente realizan dichas pruebas y para cuáles sustancias en concreto.
Además, solicita información acerca de opciones para ayudar a los distritos a realizar más pruebas, y acerca de posibles fuentes de fondos estatales y federales para apoyar dichas pruebas en el futuro.
En segunda instancia, solicita un informe más exhaustivo en 120 días con un análisis de reglamentos estatales en materia de las PFAS actualmente bajo consideración, si existen lagunas en éstas, y si reflejan las preocupaciones de comunidades en el Condado de Los Ángeles.