
Los Ángeles.- Un fallo emitido por el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos revirtió la orden judicial de que el presidente Donald Trump devuelva el control de la Guardia Nacional desplegada en Los Ángeles al gobernador de California Gavin Newsom.
Esa orden se dio a solo horas de que un juez federal Charles Breyer determinó que el proceder del Primer Mandatario de la Nación de usar a los agentes federales para intervenir en los actos de desobediencia derivados de las protestas contra ICE, es ilegal y viola la Décima Enmienda.
El Trbunal de Apelaciones programó una audiencia para el martes 17 de junio.
California demandó al gobierno federal
Newsom demandó al Gobierno Federal por el despliegue de la Guardia Nacional contra su voluntad. Posteriormente, California presentó una moción de emergencia solicitando al juez que impidiera que la Guardia Nacional colaborara en las redadas de inmigración.
El gobernador argumentó que las tropas se desplegaron originalmente para proteger edificios federales y quería que el tribunal impidiera que las tropas ayudaran a proteger a los agentes de inmigración durante las redadas, argumentando que involucrar a la Guardia Nacional solo aumentaría las tensiones y promovería el malestar social.
El mayor general Scott Sherman, comandante de la Fuerza de Tarea 51, que supervisa a las tropas de la Guardia Nacional y a los Marines enviados a Los Ángeles, declaró que, hasta el miércoles, unos 500 efectivos de la Guardia Nacional habían recibido entrenamiento para acompañar a los agentes en operaciones de inmigración.
Brett Shumate, abogado del gobierno federal, afirmó que Trump cumplió con la ley al informar al general a cargo de las tropas sobre su decisión y que tendría la autoridad para convocar a la Guardia Nacional incluso si no lo hubiera hecho.
En un escrito presentado antes de la audiencia del jueves, el Departamento de Justicia afirmó que las órdenes de Trump no estaban sujetas a revisión judicial.