Los Ángeles.- Aunque son considerados trabajadores esenciales que producen el 25 por ciento de los alimentos agrícolas que van a las mesas de los estadounidenses, en su mayoría inmigrantes de México, y Centroamérica, quedaron fuera de los fondos humanitarios por el Covid-19, denunció Genoveva Islas.
La fundadora y CEO de la Fundación Cultiva la Salud, quien participó en una teleconferencia organizada por Ethnic Media Services, manifestó que la calidad de vida de los campesinos empeoró desde que surgió el Coronavirus.
“Actualmente existe preocupación de que se propague el coronavirus en la región, podría ser catastrófico no sólo para California, sino para todo el país”, expresó. “Para los campesinos siempre ha habido falta de recursos y apoyos. Ellos son esenciales, y así deben ser tratados por todos”.
La defensora de la salud pública añadió que además de de la explotación que sufren los campesinos, en su mayoría sin documentos, tampoco tienen un plan de retiro, seguro médico, calidad de agua y vivienda digna.
“Todas esas necesidades y desventajas se han multiplicado con la aparición del COVID-19”, dijo.
EL GOBIERNO NO HACE LO SUFICIENTE
Islas también denunció que que el gobierno no hace lo suficiente para ayudar a la comunidad del campo.
“Realmente me enoja que las comunidades de inmigrantes han sido abandonadas de todos los fondos humanitarios por el COVID”, manifestó. “Es triste que en momentos de tanta necesidad y empatía nadie quiera deducir los impuestos; y por supuesto que debe haber más ayuda y protección para ellos”.
Explicó que lo que está pasando ahora en el Valle de San Joaquín es que muchos se están quedando sin vivienda.
“Necesitamos tener alberges para poder recibirlos y también atenderlos”, dijo.
“Hay grupos defensores de derechos humanos y de los trabajadores del campo que están ayudando para que no les quiten el agua, pero nuestros líderes políticos lo saben y no hacen nada”.
Islas acreditó los logros a favor de la comunidad a esas organizaciones.
“Todo esto antes de la emergencia (del Covid-19)”, reiteró. “Lo repito, el Valle de San Joaquín ya estaba pasando por situaciones difíciles antes de esta pandemia, entonces definitivamente empeoró aún más”.
COMUNIDAD EN RIESGO
Islas informó que hasta el 17 de abril, en el Valle de San Joaquín, la región que produce la mayor parte de verduras y frutas, hay acerca de mil 921 casos positivos y 62 muertes de Coronavirus.
Dijo que la preocupación de más contagios proviene a que en el área viven personas que sufren de enfermedades como el asma, obesidad y diabetes.
“Enfermedades que sabemos son las más peligrosas para contraer este virus. Y esto puede traer consecuencias graves”, añadió. “Existe el riesgo de no poder responder a tiempo en caso de que la mayoría enferme. Es importante ayudar a toda esta comunidad, porque si no pueden cultivar, tampoco tendremos comida en nuestra mesa.
“Necesitamos proteger a nuestros trabajadores del campo, necesitamos la ayuda suficiente para que ellos puedan seguir trabajando con la seguridad de que están protegidos”, añadió.