Por: Sunita Sohrabji / ACoM
Varios líderes del estado de California y el gobernador Gavin Newsom anunciaron el 14 de agosto una propuesta para trazar nuevas líneas de redistribución de distritos, en respuesta a una acción similar de la Legislatura del estado de Texas
Rodeado de líderes comunitarios y políticos demócratas, el gobernador de California, Gavin Newsom, anunció el 14 de agosto la «Ley de Respuesta a la Manipulación Electoral», que permitiría a los legisladores del estado volver a trazar los mapas de los distritos del Congreso, sin pasar por la Comisión Ciudadana de Redistribución de Distritos independiente.
Newsom ha propuesto una elección especial el 4 de noviembre que permitiría a los votantes aprobar los nuevos mapas, que apuntan a obtener 5 escaños más demócratas en el Congreso. 43 de los 52 miembros del Congreso del estado son actualmente demócratas.
Agentes del ICE se apostaron frente al Museo Nacional Japonés Americano en Los Ángeles, donde se celebró la conferencia de prensa de Newsom. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, denunció la acción y varios oradores la calificaron de una muestra más del autoritarismo que gobierna Estados Unidos.
Los mapas de redistribución de distritos suelen elaborarse después de cada censo. Actualmente, los republicanos tienen una escasa mayoría en la Cámara de Representantes, con un margen de 219-212. Newsom declaró que Trump «sabe que es un presidente fracasado», con políticas que han destrozado la economía, el mercado laboral, la atención médica y la estructura social, pero necesita mantener su mayoría en la Cámara para continuar con su agenda draconiana.
Batalla de Texas
Esta medida se produce en un momento en que la Legislatura estatal de Texas intenta manipular los mapas de sus distritos electorales para obtener cinco escaños republicanos adicionales antes de las elecciones intermedias de 2026. Con el respaldo del presidente Donald Trump y el gobernador de Texas, Greg Abbott, la medida fue aprobada fácilmente en el Senado de Texas por 19 votos a favor y 2 en contra. Posteriormente, la propuesta pasó a la Cámara de Representantes. Cincuenta demócratas de la Cámara de Representantes de Texas abandonaron el estado hace dos semanas para bloquear el quórum en la Cámara, pero anunciaron el 14 de agosto que regresarían la semana siguiente.
“Lo que intentan es reescribir las reglas a mitad de camino porque saben que van a perder”, declaró el representante estatal de Texas, Gene Wu, ese mismo día en una rueda de prensa organizada por American Community Media/Houston Ethnic Media. “Y saben que van a perder porque todo lo que está sucediendo es increíblemente impopular, no solo lo que hace el presidente Trump, sino también lo que hacen los republicanos en el Congreso”.
El gran y hermoso proyecto de ley de Trump implica recortes masivos en comunidades de todo Texas, no solo en ciudades liberales, sino también en comunidades rurales. También afecta a los agricultores, a los trabajadores, a todos. Y la gente está empezando a darse cuenta y lo sabe. Los republicanos lo saben y saben que la gente los culpará por seguirle el juego a Trump. Por eso intentan recortarlo preventivamente, dijo Wu.
«Este es un momento decisivo para nuestra democracia», dijo Newsom. «Si logra manipular las elecciones intermedias, tendremos un presidente autoritario postulándose a un tercer mandato».
Los «mapas de activación» propuestos entrarán en vigor si algún estado de mayoría republicana intenta manipular sus mapas. Florida, Indiana, Misuri y Ohio también están considerando la posibilidad de manipular sus mapas. Newsom anunció que la Legislatura estatal se reunirá la próxima semana para redactar una serie de proyectos de ley relacionados con la redistribución de distritos.
‘Caos’
Varios líderes estatales señalaron que el presidente ya había intentado esta estrategia antes, tras perder las elecciones de 2020, al llamar al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffsenperger, para que «encontrara 11,780 votos» y anulara los resultados electorales de ese estado. Raffsenperger, republicano, no se rindió.
La veterana congresista Maxine Waters, demócrata de Los Ángeles, afirmó que el objetivo de Trump es “silenciar las voces de las personas negras y morenas que odia”.
Waters destacó la presencia de la Guardia Nacional y los Marines de EE. UU., quienes recibieron órdenes de deportar a su ciudad a principios de este año. «El país está indignado por este caos. El ICE no puede seguir entrando en nuestros supermercados, escuelas, lugares de trabajo y lugares de culto para intentar identificar a personas que deberían ser deportadas».
A principios de esta semana, Trump anunció el despliegue de la Guardia Nacional para patrullar las calles de Washington, DC, una medida que, según dijo, era para combatir una ola de delitos violentos.
‘Horror en nuestras calles’
El líder sindical David Huerta, presidente del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios de California, coincidió con los comentarios de Waters. «Hay horror en nuestras calles. Agentes de ICE están deteniendo a padres, madres, tías y tíos».
Debemos defender nuestra democracia. No podemos permitir que se prive de sus derechos a los votantes. Los votantes de California están en la primera línea de la lucha contra el autoritarismo, afirmó.
La medida de tres partes anunciada por Newsom:
- Mantiene la Comisión Ciudadana de Redistribución de Distritos de California y declara una política estatal que apoya el uso de comisiones de redistribución de distritos justas y no partidistas en todo el país.
- Adopta temporalmente nuevos distritos del Congreso de California para su uso en las elecciones del Congreso hasta el año 2030.
- Preserva los mapas actuales del Congreso de California si Texas u otros estados también mantienen sus mapas originales.
Newsom dijo a los periodistas que confía en que tiene los votos en la Legislatura estatal para lograr que se aprueben las medidas.
