Muchos estudiantes alrededor de Estados Unidos se han visto afectados por la reciente inflación porque tienen que tomar medidas inesperadas para poder pagar un mes más de alojamiento o para echar gasolina y poder movilizarse.
Un reciente informe de la Universidad de Georgetown, aseguró que el costo promedio de la educación universitaria ha aumentado un 169% desde 1980.
Con un costo promedio de más de $27,000 en universidades públicas del estado incluyendo matrícula, alojamiento, comida, libros y otros suministros. Ese costo promedio se acerca a los $56,000 en universidades privadas.
La universidad trae consigo nuevas experiencias y enseñanzas, pero también la realidad de que todas estas experiencias requerirán de dinero, lo que hace que los jóvenes adultos o cualquier otra persona que esté estudiando en estos momentos tengan dificultades para administrar su dinero, y mucho menos para ahorrar para futuros objetivos.
La buena noticia es que existen herramientas digitales que ayudan a los estudiantes universitarios a administrar su dinero de forma inteligente mientras hacen malabares con sus horarios de clase y otras responsabilidades.
He aquí algunos consejos y herramientas que ayudarán a los estudiantes universitarios establecer buenos hábitos financieros:
- Controla tus gastos: Como estudiante universitario, es fundamental cuidar de tus finanzas y empezar a tener esa autonomía financiera que te permite crecer en conocimiento y experiencia. El primer paso a la independencia financiera es el hábito de poner atención al dinero y ver los gastos comunes como posibles oportunidades de ahorro. Gasto engañosos como suscripciones sin usar, salidas imprevistas a restaurantes y cafeterías, e innecesarias compras en oferta, te pueden sacar por completo de tu presupuesto mensual. Muchas instituciones bancarias te permiten monitorear tus gastos, retiros y depósitos de dinero, de una forma fácil y segura. Por ejemplo, con la cuenta Chase College CheckingSM puedes administrar tu dinero, ver tus cuentas, pagar tus facturas y transferir o solicitar dinero en instantes usando la aplicación de Chase mobile.
- Usa el crédito sabiamente y con moderación: La vida estudiantil es diferente de una persona a otra, pero todos podemos estar de acuerdo en una cosa: ¡puede ser costosa! Es común que los estudiantes se apoyen mucho en las tarjetas de crédito ya que puede facilitar los pagos de diversas cosas sin tener que dar el efectivo por adelantado. Sin embargo, es importante saber usarlas especialmente si no tienes suficiente efectivo para pagar la tarjeta en su totalidad al final del mes. Este método deberíamos usarlo en caso de una emergencia, ya que el uso excesivo del crédito puede ser peligroso. Ten en cuenta que tu puntaje de crédito puede afectar tu capacidad para obtener préstamos, y puede ayudarte a calificar a tasas de interés más bajas, por lo que debes tener cuidado con tus gastos y pagar tus deudas a tiempo.
- Proponte una meta y cultiva el hábito de ahorrar: ¿Te quieres ir de viaje o comprarte la computadora de último modelo? Ahorrar dinero así sea solo un $1 es la mejor manera de alcanzar tus metas más rápido. Algunas metas de ahorro pueden requerir más tiempo (y dinero), pero puedes lograrlo con el plan adecuado. Los bancos generalmente tienen aplicaciones que te ayudan a automatizar transferencias desde tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorros. Puedes escoger el monto y la frecuencia de estas transferencias y así ahorrar a tu manera y de forma automática.
- Mejora tus prácticas financieras con información adicional: La tecnología de hoy en día te da acceso a un sin límite de información que puedes usar para tu beneficio. Dale chispa a tu curiosidad y encuentra maneras adicionales de administrar y hacer crecer tu dinero. El Centro de recursos para estudiantes de Chase está repleto de información útil en inglés y español. ¡Empieza tu futuro con fuerza!