El verano está en su apogeo, los días son más largos, el sol más intenso y mayor la amenaza de los dañinos rayos ultravioleta (UV).
La exposición excesiva al sol puede ponernos en riesgo de padecer graves problemas oculares de corto y largo plazo, no importa si somos jóvenes o mayores, ni la época del año. Es fácil prevenir: debemos usar anteojos de sol capaces de bloquear la radiación ultravioleta. Sin embargo, ¿cómo saber si los anteojos de sol que tenemos son capaces de proteger nuestra visión y la de nuestra familia?
A fin de llamar la atención sobre este importante tema de salud ocular, los oftalmólogos (médicos especializados en el cuidado clínico y quirúrgico de los ojos) comparten información sobre cómo proteger nuestros ojos de los daños causados por el sol.
Cuando compre anteojos de sol busque una etiqueta o anotación que indique protección 100% contra rayos UVA y UVB, o protección 100% contra UV 400. La protección UV es el dato esencial que debemos buscar en unos anteojos de sol. La oscuridad de las lentes no indica el grado de protección UV, tampoco el precio. Incluso los anteojos más económicos pueden ofrecer una buena protección.
Si duda de la protección UV indicada en la etiqueta de sus anteojos, llévelos a una óptica. Cualquier óptica con medidor de luz UV podrá ayudarle a probar sus anteojos de sol. El medidor de luz UV ofrece una prueba práctica cuando no estamos seguros de que la etiqueta de los anteojos sea veraz en cuanto a protección contra estos rayos o cuando los anteojos son viejos y queremos asegurarnos de su eficacia.
Las consecuencias de no proteger los ojos de los dañinos rayos del sol son indudables. Exponerlos a luz solar intensa durante demasiado tiempo sin la protección adecuada puede hacer que los rayos UV quemen la córnea y causen ceguera temporal en tan solo unas horas.
La exposición al sol durante lapsos prolongados está vinculada a enfermedades oculares más graves, como cataratas, cáncer ocular y crecimiento de tejidos sobre el ojo o cerca de él. La exposición durante toda una vida también tiene probabilidades de incrementar la progresión de la degeneración macular relacionada con la edad, un trastorno capaz de causar ceguera.
«Es muy importante que los niños usen anteojos capaces de bloquear los rayos UV desde que son pequeños. El daño acumulado a lo largo del tiempo es el causante del riesgo de desarrollar una enfermedad degradante de la visión», dijo el Dr. Jeff Pettey, vocero clínico de la Academia Estadounidense de Oftalmología. «Nunca es tarde para cultivar un buen hábito. Empiece hoy mismo a proteger sus ojos».
Además de los anteojos oscuros, considere usar un sombrero de ala ancha. Los sombreros ha demostrado limitar significativamente la exposición a los rayos dañinos. ¡Tampoco olvide el bloqueador solar!
Obtenga más información sobre cómo proteger sus ojos del sol a lo largo del año en el sitio web EyeSmart de la Academia.
FUENTE American Academy of Ophthalmology