Por: Nora Estrada
Los Ángeles.- Como Flashback, un pequeño corrió y se refugió en brazos del Arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, cuando el líder católico cruzaba la explanada de la Catedral durante los festejos a la Virgen de Guadalupe el pasado 11 de diciembre.
Se trata de un niño de seis años lleno de vida, juguetón como cualquier niño de su edad. En un momento estaba con Gómez y al instante estaba al otro extremo del patio junto al altar de la Virgen Morenita.
Al perspicaz peque no se le escapaba nada. Estaba al tanto de la ubicación y los quehaceres de su madre, quien es la coordinadora de los grupos de danza del Comité Guadalupano de la Arquidiócesis de Los Ángeles.
La vitalidad de Jesús, el Flashback con una réplica de la tilma de la Virgen de Guadalupe como escudo, es sorprendente, pero su carisma y el amor que profesa deja a muchos asombrado.
El pequeño abraza por instantes a todas las personas que se acercan a sus padres. Los hace con quienes siente tienen buenas vibras.
Vestido de San Juan Diego: Con bigote, huaraches, camisa y pantalones de manta, sin olvidar el paliacate y sombrero, Jesus le dedicó grandes momentos a la Virgen de Guadalupe. La admiraba, platicaba con ella, le pedía por su familia y le agradecía por la vida.
A su corta edad, el pequeño sabe de los milagros de la Virgen del Tepeyac porque el mismo es un milagro de vida, cuenta su madre, Claudia Fernández.
“Fabian de Jesús es mi milagro”, dice la progenitora del pequeño con los ojos llorosos.
“Aunque toda mi vida hemos necesitado del amor de la madre, de la Santísima Virgen, porque siempre hemos sido católicos y devotos desde que era pequeña, tengo la bendición de conocer los alcances divinos de la Virgen, me hizo un milagro muy especial en mi vida, que es nuestro niño, quien nació con dificultades y los doctores no nos lo aseguraban por mucho tiempo”.
Fernández explicó que cuando Jesús llegó a este mundo, nació con una vena del cerebro tapada.
“Nos dieron malos pronósticos, y que si vivía, no iba a tener una vida normal. Hoy estamos muy felices, orgullosos y agradecidos con la Virgen al verlo lleno de vida a sus seis años y muy sano, damos gracias a Dios y a la Virgen Santísima por eso por eso”, dijo.
Fernández agregó que su hijo a su escasa edad asegura que la Virgen de Guadalupe es su madre.
“Nosotros como padres le hemos enseñado el respeto por la Virgen de Guadalupe, pero verdaderamente él siente en su corazoncito mucho amor”, comentó. “Incluso, cada vez que ve una imagen religiosa nos dice con respeto: ‘Persignensen’”.
Fernández dijo que las acciones de Fabian de Jesús son parte del milagro de la Guadalupana.
“El niño nos ha enseñado que alguien tan pequeñito entiende que el amor de la Virgen es enorme”, expresó.